Convirtiendo a personas ordinarias en colaboradores extraordinarios.
Todos los seres humanos tenemos defectos, y en ocasiones el éxito en un ambiente de trabajo depende en gran medida de las habilidades de la persona quien administra su trabajo.
El administrador debe tener un conjunto de habilidades y brindar la atención necesaria a cada uno de sus empleados.
El libro "Growing Great Employees" de Erika Andersen, trata sobre la analogía entre empleados y plantas, y entre los administradores y los jardineros.
Cada vez mas los empleados se ven a si mismos como una parte importante en la empresa. Ellos le dan algo a la organización para la que trabajan: habilidades, experiencia, talento; y la organización les da algo a cambio: un lugar para tener influencia, ganar dinero, oportunidades para aprender y crecer, conexiones profesionales. Por lo que los administradores deben ser efectivos en brindarle a sus empleados lo que necesitan a fin de mantener a las mejores personas en su equipo.
Ser un buen administrador requiere de habilidades, de la misma manera en la que un jardinero debe aprender a cuidar de sus plantas.
Durante los siguientes días veremos algunas analogías sobre como un jardinero llega a tener su jardin deseado, y al mismo tiempo aprender como un administrador puede llegar a tener su equipo de trabajo deseado.
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