Colin Powell nació en Harlem en 1937. Sus padres fueron inmigrantes de Jamaica, y le inculcaron la importancia de la educación y la realización personal.
En 2001 fue nombrado Secretario de Estado. En ese momento era el cargo más alto al que había optado una persona afro-americana en algún gobierno de los Estados Unidos.
Tuvo una importante participación después de los ataques del 11 de septiembre del 2001, en las incursiones militares en Afganistán.
A partir de su metodología de liderazgo se identifican patrones que se pueden aplicar para mejorar las características de liderazgo de una persona, algunas de ellas pueden parecer revolucionarias, ya que existen puntos de vista y conceptos erróneos que presentan el liderazgo como un concurso de popularidad o una demostración de poder.
Las características identificadas en Colin Powell son:
- Saber cuando hacer enfadar a las personas. Un líder debe tomar decisiones que deben ser las mejores para el equipo, sin importar que algunas personas no estén de acuerdo, incluso pueden llegar a ofenderse por las decisiones tomadas.
- Promover un choque de ideas. Un líder debe buscar las mejores alternativas, y esto lo puede lograr incentivando los debates para obtener también mejores justificaciones de las decisiones tomadas.
- No caer en la trampa del ego. A pesar de que un líder casi siempre tiene una posición de autoridad, es necesario que éste sepa cuando aceptar las opiniones y experiencia que pueden brindar los subalternos.
- No tener una mente cerrada. El pensamiento de un líder en ocasiones puede no ser el mejor, o la única forma de hacer algo. Se deben tomar en cuenta las mejores opciones aunque no sean aportadas por el líder.
- Buscar la desorganización. Muchas veces un líder piensa que en el orden encontrará lo mejor del grupo, pero también puede buscar desorganizar al grupo para encontrar alternativas novedosas y más eficaces.
- Saber cuando desafiar a los expertos. De la misma manera como el pensamiento del líder no siempre es el más adecuado, muchas veces suele suceder que la opinión de los expertos no debe ser la última palabra. Se debe cuestionar la opinión de los expertos cuando ésta ponga en riesgo el trabajo del líder y su equipo.
- Tener cerca al enemigo. Esto nos puede permitir conocerlo a fondo, saber cuales son sus fortalezas (para mejorar nosotros y poder cubrirlas) y sus debilidades (para utilizarlas en nuestro beneficio).
- Los planes sobre las personas. Nunca se debe olvidar que el factor importante que hace triunfar una empresa no son los planes exitosos, sino las personas que los llevan a cabo. El factor personal de un empleado o de un miembro del equipo es algo que se debe cuidar. No ver a las personas como una cifra mas, sino verlas como parte integral del éxito.
- La situación indica la estrategia. Existen personas que se hacen llamar lideres y utilizan estrategias solo porque están de moda, o porque todos la utilizan, o porque ha funcionado en diferentes contextos. La selección de la estrategia a utilizar debe basarse en la situación y no dejarse guiar por las tendencias.
- Confiar en las personas en las trincheras. Quienes están en las trincheras, son quienes conocen de primera mano como funciona la empresa, saben cómo es que se obtienen los resultados. Es necesario confiar en estas personas, en la capacidad y conocimiento que ellos tienen de la empresa, porque son la base del éxito o fracaso.
- Tomar descansos cuando es necesario. El trabajo puede resultar muy desgastante, por eso es necesario tomar períodos de descanso cada cierto tiempo, para reforzar la importancia de los miembros del equipo y para renovar fuerzas y volver para seguir obteniendo éxito en las empresas
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